El género Spizaetus incluye a cuatro especies de accipítridas comúnmente conocidas como águilas-azor: el Águila Inca (Spizaetus isidori), el Águila negra (Spizaetus tyrannus), el Águila adornada (Spizaetus ornatus) y el Águila blanquinegra (Spizaetus melanoleucus). Estas águilas se distribuyen exclusivamente en bosques tropicales y subtropicales de la región Neotropical (desde el centro de México hasta el norte de Argentina), son de tamaño mediano a grande y se caracterizan por poseer tarsos emplumados, ojos amarillos o rojizos y un penacho de plumas eréctiles en la cabeza. El Águila Inca y el Águila adornada pueden variar su dieta desde una casi totalmente ornitófaga hasta otra más balanceada entre aves y mamíferos, de acuerdo a la región geográfica donde se encuentren. Otras más especializadas se alimentan casi exclusivamente de aves que cazan al vuelo, como el Águila blanquinegra, o mamíferos y reptiles que capturan entre los árboles o en el suelo, como el Águila negra.
Debido a su conducta sigilosa (a excepción del Águila negra), hasta ahora sólo existe un puñado de nidos publicados para cada especie, permaneciendo muchos aspectos de su historia natural desconocidos para la ciencia. Por otra parte, la creciente deforestación a lo largo del Neotrópico está afectando negativamente la viabilidad de sus poblaciones en varias zonas. Esto, sumado a la intensa persecución humana amenaza con extirpar progresivamente a estas imprescindibles especies de vastas áreas geográficas.
Con el objetivo de conocer mejor la historia natural de estas especies y con ello, contribuir a tomar mejores decisiones que permitan su conservación, la Fundación Ñankulafkén ha estado desarrollando diversos estudios en sus áreas de reproducción en el centro de Perú, en las estribaciones Andinas de Ecuador y en el noroeste de Argentina, en colaboración con otras organizaciones hermanas como la Fundación Cóndor Andino Ecuador, The Peregrine Fund, el CECARA (Argentina) y CORBIDI (Perú).